Garachico
Garachico es un pueblo precioso, una parada imprescindible si se encuentra en Tenerife. Pero ante todo es un pueblo muy peculiar por su historia. Fue fundada por un banquero genovés, Cristóbal de Ponte en el año 1496 y el rey Alfonso XIII le concedió en el año 1916 el título de Villa y Puerto. También fue el principal puerto de Tenerife durante los siglos XVI y XVII.
Garachico es un pueblo con carácter que resurgió de sus cenizas después que en el año 1706 la erupción del volcán Trevejo sepultara la mayor parte del pueblo. Pero gracias a la tenacidad de sus habitantes llegó a ser el principal puerto de la isla.
Una de las cosas interesantes es el Caletón, es una zona de baño, formada por varias piscinas de origen natural. Las piscinas se originaron por la lava procedente de la erupción que hemos comentado antes que al entrar en contacto con el mar se solidificó dando lugar a unas piscinas naturales preciosas.
El Roque de Garachico es un islote que se puedo divisar desde casi cualquier parte del pueblo. El roque es una formación geológica volcánica de coladas basálticas que ha quedado aislada debido al retroceso de la costa por la erosión marina. Es un refugo para aves migratorias.
Si dejamos la costa y nos adentramos en el pueblo nos encontramos con la Plaza de la Libertad donde se encuentra el Ayuntamiento de Garachico y la iglesia de Nuestra Señora de Los Ángeles entre otros de los edificios más emblemáticos de la villa. En el centro de la plaza nos podemos sentar a la sombra de los árboles y disfrutar de una tranquilidad absoluta.
Al ser Garachico uno de los puertos canarios más importantes necesitaba de un castillo defensivo, ese es el Castillo de San Miguel. A pesar de que fuera construido en el siglo XVI se encuentra en perfecto estado, como curiosidad fue uno de los pocos edificios que no sufrieron daños con la erupción del volcán. Alberga un museo y un centro de información dónde se puede acceder previo pago.
Pero lo más agradable es perderse por sus calles y disfrutar de sus gentes y su oferta gastronómica muy variada.